Poeta venezolano Rafael Cadenas, galardonado Premio Miguel de Cervantes el lunes 24 de abril de 2023.
El siguiente poema Derrota escrita el 31 de mayo de
1962, cuando el poeta sentía que no podía llegar a nada en la vida, se
convierte hoy en ejemplo al ser condecorado por el Rey Felipe VI,
convirtiéndose en uno de los venezolanos aún con vida más importantes del país
y en la esperanza para las personas que viven sin esperanza.
El siguiente poema Derrota escrita el 31 de mayo de
1962, cuando el poeta sentía que no podía llegar a nada en la vida, se
convierte hoy en ejemplo al ser condecorado por el Rey Felipe VI,
convirtiéndose en uno de los venezolanos aún con vida más importantes del país
y en la esperanza para las personas que viven sin esperanza.

Poesía «Derrota»
Yo que no he tenido nunca un oficio
que ante todo competidor me he sentido débil
que perdí los mejores títulos para la vida
que apenas llego a un sitio ya quiero irme
(creyendo que mudarme es una solución)
que he sido negado anticipadamente y escarnecido
por los más aptos
que me arrimo a las paredes para no caer del todo
que soy objeto de risa para mí mismo que creí
que mi padre era eterno
que he sido humillado por profesores de literatura
que un día pregunté en qué podía ayudar y la
respuesta fue una risotada
que no podré nunca formar un hogar, ni ser
brillante, ni triunfar en la vida
que he sido abandonado por muchas personas porque
casi no hablo
que tengo vergüenza por actos que no he cometido
que poco me ha faltado para echar a correr por la
calle
que he perdido un centro que nunca tuve
que me he vuelto el hazmerreír de mucha gente por
vivir en el limbo
que no encontraré nunca quién me soporte
que fui preterido en aras de personas más
miserables que yo
que seguiré toda la vida así y que el año entrante
seré muchas veces más burlado en mi ridícula ambición
que estoy cansado de recibir consejos de otros más
aletargados que yo («Ud. es muy quedado, avíspese, despierte»)
que nunca podré viajar a la India
que he recibido favores sin dar nada en cambio
que ando por la ciudad de un lado a otro como una
pluma
que me dejo llevar por los otros
que no tengo personalidad ni quiero tenerla
que todo el día tapo mi rebelión
que no me he ido a las guerrillas
que no he hecho nada por mi pueblo
que no soy de las FALN y me desespero por todas
estas cosas y por otras cuya enumeración sería interminable
que no puedo salir de mi prisión
que he sido dado de baja en todas partes por inútil
que en realidad no he podido casarme ni ir a París
ni tener un día sereno
que me niego a reconocer los hechos
que siempre babeo sobre mi historia
que soy imbécil y más que imbécil de nacimiento
que perdí el hilo del discurso que se ejecutaba en
mí y no he podido encontrarlo
que no lloro cuando siento deseos de hacerlo
que llego tarde a todo
que he sido arruinado por tantas marchas y
contramarchas
que ansío la inmovilidad perfecta y la prisa
impecable
que no soy lo que soy ni lo que no soy
que a pesar de todo tengo un orgullo satánico
aunque a ciertas horas haya sido humilde hasta igualarme a las piedras
que he vivido quince años en el mismo círculo
que me creí predestinado para algo fuera de lo
común y nada he logrado
que nunca usaré corbata
que no encuentro mi cuerpo
que he percibido por relámpagos mi falsedad y no he
podido derribarme, barrer todo y crear de mi indolencia, mi
flotación, mi extravío una frescura nueva, y
obstinadamente me suicido al alcance de la mano
me levantaré del suelo más ridículo todavía para
seguir burlándome de los otros y de mí hasta el día del juicio final.
Rafael Cadenas
Poema publicado el 31 de mayo de
1962, en Clarín del viernes. Compilado junto con Los
cuadernos del destierro y Falsas maniobras, en 1970.Recogido en: Poemas selectos,
2004 Rafael CadenasEl Profesor, poeta, ensayista, Rafael
Cadenas nació en una llanera ciudad de la para entonces Venezuela rural,
llamada Barquisimeto ubicada en el Estado Lara, el 8 de abril de 1930, donde se
inicio desde muy joven en la literatura, siendo seducido ante la activa
propaganda comunista por el Partido Comunista de Venezuela, motivando ante esta
simpatía ser visto como amenaza por es estado, siendo llevando a la cárcel y el
exilio en la isla de Trinidad hasta 1957 durante la dictadura del General
Marcos Pérez Jiménez.Su poema Derrota fue
fundamental en la poesía venezolana de la década de 1960. pero entre sus obras
más destacadas se encuentran Amante, de 1983, Realidad y
literatura, de 1979 y El taller de al lado, de 2005, en donde
se encuentran también Inquisidores, Dificultad y Nuevo
mundo.En 1985 recibió el Premio Nacional de
Literatura de Venezuela y en 2009 el Premio FIL de Literatura en
Lenguas Romances, en Guadalajara, México; Así mismo fue galardonado en 2018
con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, y a
sus 92 años se convierte en el
primer venezolano en ganar el Premio Cervantes, considerado el máximo
reconocimiento literario en español y dotado de 125 mil euros.Ello no impidió años después que fuese
profesor en la Escuela de Letras de la Universidad Central de Venezuela
(U.C.V.) donde es jubilado.Dotado de una refinada
sensibilidad para la poesía, ésta se caracteriza por ser una obra densa y
estrechamente vinculada al pensamiento filosófico. se lo compara con autores
como Friedrich Hölderlin, Rainer María Rilke o Gorostiza.
Su obra parece fusionar los derroteros de la actitud reflexiva con la
inspiración pura. En la lectura de su poesía puede encontrarse un universo
mágico, lleno de matices y llevarle a reflexionar sobre las cosas más
relevantes de la vida.
Poesía «Derrota»
Yo que no he tenido nunca un oficio
que ante todo competidor me he sentido débil
que perdí los mejores títulos para la vida
que apenas llego a un sitio ya quiero irme
(creyendo que mudarme es una solución)
que he sido negado anticipadamente y escarnecido
por los más aptos
que me arrimo a las paredes para no caer del todo
que soy objeto de risa para mí mismo que creí
que mi padre era eterno
que he sido humillado por profesores de literatura
que un día pregunté en qué podía ayudar y la
respuesta fue una risotada
que no podré nunca formar un hogar, ni ser
brillante, ni triunfar en la vida
que he sido abandonado por muchas personas porque
casi no hablo
que tengo vergüenza por actos que no he cometido
que poco me ha faltado para echar a correr por la
calle
que he perdido un centro que nunca tuve
que me he vuelto el hazmerreír de mucha gente por
vivir en el limbo
que no encontraré nunca quién me soporte
que fui preterido en aras de personas más
miserables que yo
que seguiré toda la vida así y que el año entrante
seré muchas veces más burlado en mi ridícula ambición
que estoy cansado de recibir consejos de otros más
aletargados que yo («Ud. es muy quedado, avíspese, despierte»)
que nunca podré viajar a la India
que he recibido favores sin dar nada en cambio
que ando por la ciudad de un lado a otro como una
pluma
que me dejo llevar por los otros
que no tengo personalidad ni quiero tenerla
que todo el día tapo mi rebelión
que no me he ido a las guerrillas
que no he hecho nada por mi pueblo
que no soy de las FALN y me desespero por todas
estas cosas y por otras cuya enumeración sería interminable
que no puedo salir de mi prisión
que he sido dado de baja en todas partes por inútil
que en realidad no he podido casarme ni ir a París
ni tener un día sereno
que me niego a reconocer los hechos
que siempre babeo sobre mi historia
que soy imbécil y más que imbécil de nacimiento
que perdí el hilo del discurso que se ejecutaba en
mí y no he podido encontrarlo
que no lloro cuando siento deseos de hacerlo
que llego tarde a todo
que he sido arruinado por tantas marchas y
contramarchas
que ansío la inmovilidad perfecta y la prisa
impecable
que no soy lo que soy ni lo que no soy
que a pesar de todo tengo un orgullo satánico
aunque a ciertas horas haya sido humilde hasta igualarme a las piedras
que he vivido quince años en el mismo círculo
que me creí predestinado para algo fuera de lo
común y nada he logrado
que nunca usaré corbata
que no encuentro mi cuerpo
que he percibido por relámpagos mi falsedad y no he
podido derribarme, barrer todo y crear de mi indolencia, mi
flotación, mi extravío una frescura nueva, y
obstinadamente me suicido al alcance de la mano
me levantaré del suelo más ridículo todavía para
seguir burlándome de los otros y de mí hasta el día del juicio final.
Rafael Cadenas
Una isla (1958)
Los cuadernos del destierro (1960, 2001)
«Derrota» (1963) (poema publicado el 31 de mayo en Clarín del viernes; compilado en 1970, junto con Los cuadernos del destierro y Falsas maniobras
Falsas maniobras (1966)
Intemperie (1977)
Memorial (1977) Edición bilingüe (Español-Inglés), publicada por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (2007)
Amante (1983)
Dichos (1992)
Gestiones (1992) [Premio Internacional Juan Antonio Pérez Bonalde]
Antología (1958-1993) (1996), (1999)
Amante (bid & co. editor, 2002) [livre d’artiste con 58 grabados de Norma Morales)
Poemas selectos (bid & co. editor, 2004, 2006, 2009)
Amant (bid & co. editor, 2004) [traducción al francés de «Amante»)
Lover (bid & co. editor, 2004, 2009) [edición bilingüe de «Amante»)
El taller de al lado (bid & co. editor, 2005) [conjunto de sus traducciones)
Sobre abierto. Editorial Pre-Textos. 2012. ISBN 978-84-15297-82-6.
En torno a Basho y otros asuntos (Pre-Textos, 2016)
Contestaciones (Visor Libros, 2018)
Comentarios
Publicar un comentario